Real Cédula realizada por Felipe IV en referencia a la prohibición del uso del puerto de Buenos Aires para la circulación de oro y plata, así como las mercaderías cuyo destino sean las provincias de Perú y Charcas. Con dicha cédula se anulan dos anteriores, una del rey Felipe III de 1618, y otra del propio Felipe IV de 1622. (Se ha copiado del que existe en el Archivo del Tribunal del Consulado de Lima, entre las hojas 418 y 432 del libro rotulado como "Testimonio de varias cédulas de S.M. y otras providencias". Copia de José de Basterrechea.)